sábado, 31 de mayo de 2014

QUE ERES..? ZANAHORIA, HUEVO O CAFE?



El oro para ser purificado debe pasar por el fuego y el ser humano necesita pruebas para pulir su carácter. Pero lo más importante es; Cómo reaccionamos frente a las pruebas.
Una hija se quejaba a su padre acerca de su vida y cómo las cosas le resultaban tan difíciles. No sabía cómo hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.
Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejó hervir sin decir palabra.
La hija esperó impacientemente, preguntándose qué estaría haciendo su padre.
A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Sacó las zanahorias y las colocó en un bowl. Sacó los huevos y los colocó en otro bowl. Coló el café y lo puso en un tercer bowl. Mirando a su hija le dijo: “Querida, ¿qué ves?” “Zanahorias, huevos y café” fue su respuesta.
La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Luego de sacarle la cáscara, observó el huevo duro. Luego le pidió que probara el café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.
Humildemente la hija preguntó: “¿Qué significa esto, Padre?” El le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: agua hirviendo, pero habían reaccionado en forma diferente. La zanahoria llegó al agua fuerte, dura. Pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer. El huevo había llegado al agua frágil. Su cáscara fina protegía su interior líquido. Pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido. Los granos de café sin embargo eran únicos. Después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.
“¿Cual eres tú?”, le preguntó a su hija. “Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes?. ¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano de café?”
¿Y cómo eres tú, amigo? ¿Eres una zanahoria que parece fuerte pero que cuando la adversidad y el dolor te tocan , te vuelves débil y pierdes tu fortaleza? Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable? Poseías un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación, un divorcio o un despido te has vuelto duro y rígido? Por fuera te ves igual, pero ¿eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecido? ¿O eres como un grano de café? El café cambia al agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor. Si eres como el grano de café, cuando las cosas se ponen peor, tú reaccionas mejor y haces que las cosas a tu alrededor mejoren. ¿Cómo manejas la adversidad? ¿Eres una zanahoria, un huevo o un grano de café?

martes, 27 de mayo de 2014

Aprende a esperar


Planificar la vida


Desde hace muchos años, veo que numerosas personas tienen como único objetivo en la vida, ganar dinero. Personas de todas las edades, afanadas por el trabajo y obsesionadas con el mismo fin. Dispuestas a dedicar muchas horas, días y semanas del año para alcanzar sus deseos. Personas que se están convirtiendo en máquinas de generar ideas para hacer negocios y ganar más y más. Y, si la cosa funciona, todavía dedican más tiempo y energías para seguir ganando dinero. Su objetivo es generar un imperio. Su vida es como subir por una escalera que no tiene fin. Unos pocos lo logran, otros se quedan en el camino… Pero son los menos los que reflexionan sobre las cosas importantes de la vida y se plantean otro tipo de objetivos.
Me parece muy bien que cuando uno es joven y tiene una familia, trabaje para darles lo mejor y piense en el futuro y el bienestar de los hijos, dándoles una estabilidad económica que les sirva de base para que ellos puedan seguir adelante. Pero desde hace un tiempo, he comenzado a analizar la actitud de varios empresarios y quiero mencionarlos para que veamos lo equivocados que están en sus planteamientos.
El dueño de un conocido supermercado, trabaja incansablemente más de doce horas diarias durante todo el año y, en vacaciones, envía a su familia sola, porque le es imposible abandonar su negocio por dos semanas.
Otro caso es el de un conocido comerciante, que, debido al estrés del trabajo, comenzó a tener problemas de salud. El médico le recomendó que descansara unos días y se olvidase de sus responsabilidades. Hizo caso a la recomendación, y se fue a descansar con su esposa a un bonito lugar, pero como no podía con su ansiedad, llamaba constantemente a sus empleados, para saber cómo iba todo. El tiempo de reposo no le sirvió de nada, porque se llevó todos sus negocios y responsabilidades a cuestas.
Conozco a un gran empresario que trabajó desde los siete años y formó un imperio. Cuando tuvo edad de jubilarse y aprovechar los años que le quedaban, decidió construir otra fábrica para ampliar el negocio. Tardó varios años en ponerla en funcionamiento y ahora con ochenta y siete años, se da cuenta de lo equivocado que estuvo… pero claro, ¡ya es tarde para arrepentimientos!… La vida se le fue y ya no le queda tiempo para disfrutar de todo el sacrificio que hizo durante ochenta años.
Mi abuela vivió hasta los ciento dos años… Desde que tengo uso de razón y hasta que falleció, siempre le escuché la misma historia: El dinero no me alcanza… La situación está difícil y no llego a fin de mes… En su mente solo había palabras negativas y estaba obsesionada con ahorrar, guardar… por si acaso… Pasó toda su vida con el mismo pensamiento, porque nunca planifico su vida. Todo se quedó en palabras.
Quizás al leer estas historias, tu mente te haga recordar a alguien en particular… Sería normal, porque hay millones y millones de personas con este pensamiento. Viven pobres, con necesidades y dejan este mundo sin llevarse nada. Los que consiguen dejar algunas riquezas para sus herederos, también dejan grandes conflictos entre ellos.
Un amigo me dio una lección de cómo planificar la vida. El es un ingeniero que en su momento tenía diez empleados a su cargo. Trabajó para empresas petroleras y sus ocupaciones eran de muchísima responsabilidad. Un día conversando me dijo: cumplí sesenta y cinco años, si Dios lo permite me quedan entre quince a veinte años más de vida. Económicamente tengo suficiente para cubrir todas las necesidades que pueda tener. He decidido seguir trabajando a tiempo parcial, solo para estar en contacto con el mundo que me rodea, pero dedicaré la mayor parte de mi tiempo a viajar y hacer todas aquellas cosas que siempre soñé. A partir de ahora, disfrutaré todo lo que pueda.
Creo que alcanzar metas económicas es algo natural en cada uno de nosotros. Todos queremos tener una casa con todo el confort, un auto nuevo y todo lo que deseamos. Todo eso está muy bien. Lo malo está en dejar las cosas más importantes para perseguir objetivos económicos y materiales de una manera desmedida y ambiciosa, como si fuéramos a estar en este mundo para siempre.
Debemos mirar dónde está el techo de nuestros objetivos. Debemos ser sabios administradores de nuestro tiempo y aprender a darnos el espacio para disfrutar de todo lo que hemos logrado con esfuerzo. Si lo dejamos para más tarde, pensando que todavía vamos a vivir por muchos años, nos equivocaremos. El día es hoy y el tiempo es ahora…
«Hay gente tan pobre, que solo tiene dinero»

sábado, 24 de mayo de 2014

"LO ESTAS MAL ACOSTUMBRANDO A LOS BRAZOS"

"LO ESTAS MAL ACOSTUMBRANDO A LOS BRAZOS" me afirmo el verdulero. Diselo a la naturaleza que lo ubico 9 meses cerca de mi corazón, 9 meses al compás de mi respiración, 9 meses en compañía de mi voz. Ella lo mal acostumbro primero, que sabiamente lleno mis pechos lecheros, para seguir siendo uno los dos. Que te explique la naturaleza por que me sonríe cuando estoy mal y me estira los brazos loco de amor. Que lo estoy mal criando en brazos? cuando no me pide zapatos ni un auto de lujo, tan solo que lo tome, por besos babosos a cambio. No me niego a sus brazos, porque negarme seria reprimir el amor mas puro e incondicional, me pide brazos porque después de pasar casi un año tan unidos como jamás lo volveremos a estar, nuestro único consuelo es abrazarnos, para no extrañarnos tanto y amarnos más y más. Después de todo, mas temprano que tarde aprenderá a caminar y todo esto sera un hermoso recuerdo, de cuando una vez el fue bebé y mis brazos eran todo para el. Así que señor verdulero, sin duda la naturaleza es mas sabia que ambos, lo que para usted es "mal acostumbrarlo a los brazos" ella le llama AMAR, MAMAR, MAMÁ, ni los árboles sueltan sus frutos pequeños, los cargan, hasta que estén listos... Comparte si sientes lo mismo 

jueves, 22 de mayo de 2014

Beneficios para la salud


Sólo con el tiempo…


“Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia
entre sostener una mano y encadenar un alma.
Y uno aprende que el amor no significa acostarse,
y que una compañía no significa seguridad,
y uno empieza a aprender…
Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas,
y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta
y los ojos abiertos,
y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes…
y los futuros tienen su forma de caerse por la mitad.
Y uno aprende que si es demasiado
hasta el calor del sol puede quemar.
Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma,
en lugar de que alguien le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede aguantar,
que uno es realmente fuerte,
que uno realmente vale,
y uno aprende y aprende… y así cada día.
Con el tiempo aprendes que estar con alguien
porque te ofrece un buen futuro,
significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.
Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz
de amarte con tus defectos y sin pretender cambiarte
puede brindarte toda la felicidad.
Con el tiempo aprendes que si estás con una persona
sólo por acompañar tu soledad,
irremediablemente acabarás no deseando volver a verla.
Con el tiempo aprendes que los verdaderos amigos son contados
y quien no lucha por ellos, tarde o temprano,
se verá rodeado sólo de falsas amistades.
Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en momentos de ira
siguen hiriendo durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace,
pero perdonar es atributo sólo de almas grandes.
Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente es muy probable que la amistad nunca sea igual.
Con el tiempo te das cuenta que aún siendo feliz con tus amigos,
lloras por aquellos que dejaste ir.
Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida,
con cada persona, es irrepetible.
Con el tiempo te das cuenta que el que humilla
o desprecia a un ser humano, tarde o temprano
sufrirá multiplicadas las mismas humillaciones o desprecios.
Con el tiempo aprendes a construir todos tus caminos en el hoy,
porque el sendero del mañana no existe.
Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas y forzarlas a que pasen ocasiona que al final no sean como esperabas.
Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro,
sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.
Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado,
añorarás a los que se marcharon.
Con el tiempo aprenderás a perdonar o pedir perdón,
decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas,
decir que quieres ser amigo, pues ante una tumba, ya no tiene sentido.
Pero desafortunadamente, sólo con el tiempo…”

miércoles, 21 de mayo de 2014

No olvidar las raíces.


Vendrán tiempos mejores


Hay cosas muy importantes en la vida, más que lo material y debemos tratar de luchar por esas cosas que nos hacen felices.

Pero hay muchas cosas que nos hacen felices a nosotros, mas sin embargo hacen infelices a otros.


Actuamos sin pensar en el daño que le podemos ocasionar a otras personas y hay cosas que a pesar de que sabemos que están mal, luchamos por ellas. Claro, mientras no nos hagan daño.


Duele cuando decimos adiós a algo o a alguien de quien realmente estábamos aferrados y que soñábamos y veíamos un futuro con esa persona... pero... la distancia no es cuanto nos separamos, la distancia es si no volvemos...


A veces el corazón va donde la voz no llega, solo tenemos que seguirlo mientras creamos estar en lo correcto.


Algo que leí una vez y siempre recuerdo es "tal vez para el mundo solo seas alguien, pero para alguien tu eres su mundo."


Porque no nos ponemos a pensar que no todo lo dedicado fue en vano porque no es cuestión de ver quien pierde más o quien pierde menos al momento de alejarse, sino que cuando nos engañan, nos traicionan o nos hacen daño, de los dos hay uno que realmente pierde.


Porque por lo menos tu, pierdes a la persona que más querías y en quien más confiabas, pero esa persona, pierde a quien más la quería sobre la faz de la tierra.


Ten eso presente y no desperdicies tus lágrimas en quien no te quiere o en quien no tienes contigo, tampoco alimentes un corazón con falsas esperanzas y mucho menos quieras pasar tu vida, junto a alguien que no está dispuesto a pasarla contigo.


Vendrán tiempos mejores, acuérdense de eso...


Todo lo que nos pasa y lo que nos ha hecho sentirnos mal alguna vez, solo son sin sabores, pero son experiencias que nos indican que por ahí no debemos de pasar, así que agarren otro camino.

Por cada puerta que nos cierran hay 3 más abiertas esperando que entremos por ellas.

Hay que ser valiente y aceptar las cosas tal y como vienen.

EL CONEJO Y EL CUERVO


El cuervo y el conejo.
Un cuervo estaba sentado en un árbol, sin hacer nada todo el día. Un pequeño conejo se dio cuenta de esto y le pregunto:
¿Puedo sentarme como tú y pasarme todo el día sin hacer nada?
El cuervo respondió: ¡Claro! ¿Por que no?
El conejo se sentó en el suelo, y descanso.
Repentinamente, apareció un lobo salto encima del conejo y se lo comió.



 Moraleja: Para estar sentado sin hacer nada, debes estar muy, muy alto.

EL SOL DESAPARECIO

Había una vez , en una zona de altas montañas, una águila que enseñaba a su pichón a volar. Aquellos días de verano eran benignos y de cielo despejado. Un día, llegado el otoño, el cielo se cubrió de densas nubes negras. El pichón, acostumbrado a ver el cielo y el sol, pegó un grito de desesperación. No veía ese manto celeste con su sol resplandeciente. El águila, viendo esto, le pidió que le acompañara. Juntas remontaron vuelo en dirección a las nubes. Luego de una trabajosa travesía, ambas estaban por encima de las nubes. El pichón estaba loco de alegría, se había superpuesto a esas negras nubes que le ocultaban su sol y su manto azul.




 Moraleja:
Creo que a veces debiéramos desplegar nuestras alas y animarnos a volar más alto.

domingo, 18 de mayo de 2014

Atemorizado por un perro

Una esplendorosa mañana de domingo, con el más pequeño de mis hijos, caminaba muy placidamente a mi lado. Al poco tiempo, los sonidos de unas palomas que estaban comiendo en la acera lo invitaron a adelantarse con la intención de alcanzar alguna de ellas. 
De repente, su corretear y su alegría llego a su fin. A unos pocos metros había un perro que le miraba fijamente. Mi hijo se detuvo abruptamente, se dio la vuelta y vino corriendo a mi lado y se aferró fuertemente a mi mano. En ese momento se sintió protegido y no tuvo temor cuando vio pasar al perro por nuestro lado sin perturbarse.

Esta historia me hace recordar sobre nuestro andar por el mundo separado de la presencia de Dios. Siempre habrá algo que atrape nuestra atención, esta situación hará que tengamos el deseo de alejarnos de El, sin pensarlo y sin darnos cuenta El quedará detrás nuestro viendo a donde queremos llegar.
Por lo general somos ansiosos y apresurados, siempre queremos materializar aquellas ideas que nos parecen excelentes pero muchas veces a la hora de la verdad fallamos.

De pronto y sin previo aviso aparecen las consecuencias por la falta de humildad, el no aceptar consejos porque creemos que todo lo sabemos. Es entonces que comienza en nuestra vida un proceso de dolor, de frustración, problemas económicos, conflictos personales y familiares y todo tipo de problemas que puedas imaginar.

Al principio nos quedamos perplejos y parece que estamos en un callejón sin salida.

Mi consejo es que tomes el ejemplo inocente del niño, que sin pedir auxilio ante el peligro que le representaba la mirada de ese animal, corrió hacia su padre tomado su mano, porque el sintió que era el mejor lugar para estar a salvo.
Si sientes que te has alejado de la mano de Dios, es un buen momento, ya que si vuelves tu vista estará junto a ti esperando que vuelas a tomar Su mano, para llevarte por el mejor y único camino.

Si la ansiedad y el temor acechan en el umbral de tu mañana, recuerda la maravillosa promesa que Dios, nos dejo:
“Por tanto, no tengan miedo, pues yo soy su Dios y estoy con ustedes. Mi mano victoriosa les dará fuerza y ayuda; mi mano victoriosa siempre les dará su apoyo”

viernes, 16 de mayo de 2014

17 DE MAYO DIA DEL INTERNET

No exagero si digo que si hay algo que nos cambió la vida fue la llegada de Internet. Modificó las relaciones sociales, los modos de comunicarnos, nuestros trabajo y por qué no, nuestros pensamientos y concepciones.
 ¿Acaso no es cierto que ya no te acordás de cómo era la vida sin Internet? Claro que sí y, mucho menos, podemos imaginarnos qué sería de nosotros en un futuro sin la tecnología como la conocemos hoy.


La ONU designó el 17 de mayo como el Día Mundial de la Sociedad de la Información por lo que, en países como México, Perú, Chile, Argentina, España, Colombia, Uruguay, Ecuador y Venezuela (entre otros) se movió el denominado Día de Internet a esa fecha.

 
Las cartas, los telegramas, los diarios e incluso los locales dejaron de existir tal cuál los conocemos: en menos de un click podemos chatear con un pariente que vive en otro continente, hacer una videollamada a miles de kilómetros de distancia o incluso, comprar ropa sin movernos de donde estamos.

 Twitter, Facebook o Instagram son palabras que cotidianamente decimos y verbos como "chatear", "facebookear", "twittear", "instagramear"o "whatsappear" son ya conocidos y aceptados por todos. 
 Desde mi opinión, este día no es particularmente un día para celebrar sino que sirve como un espacio de reflexión para pensar cómo utilizamos las tecnologías y de qué modo pueden beneficiarnos teniendo un uso responsable de Internet.

Ninguna herramienta es mala o buena y, sin lugar a dudas, el mundo virtual transformó el nuestro en algo mejor: estamos más cerca de la gente que queremos, podemos manejar mejor nuestros tiempos, resolver problemas desde cualquier lugar y tiempo o estar informadas de todo en sólo unos minutos.

¡Que la excesiva comunicación no nos desconecte de lo importante!

Y vos, ¿Para qué cosas usas Internet?¿Cómo te benefició? Y que reflexion podes dar...?



EL AMOR Y EL TIEMPO


Había una vez una isla muy linda y de naturaleza indescriptible, en la que vivían todos los sentimientos y valores del hombre; El Buen Humor, la Tristeza, la Sabiduría… como también, todos los demás, incluso el AMOR.
Un día se anunció a los sentimientos que la isla estaba por hundirse.
Entonces todos prepararon sus barcos y partieron. Únicamente el AMOR quedó esperando solo, pacientemente, hasta el último momento.
Cuando la isla estuvo a punto de hundirse, el AMOR decidió pedir ayuda.
La riqueza pasó cerca del AMOR en una barca lujosísima y el AMOR le dijo: “Riqueza… ¿me puedes llevar contigo?” – No puedo porque tengo mucho oro y plata dentro de mi barca y no hay lugar para ti, lo siento, AMOR…
Entonces el Amor decidió pedirle al Orgullo que estaba pasando en una magnifica barca. “Orgullo te ruego… ¿puedes llevarme contigo?
No puedo llevarte AMOR… respondió el Orgullo: – Aquí todo es perfecto, podrías arruinar mi barca y ¿Cómo quedaría mi reputación?
Entonces el AMOR dijo a la Tristeza que se estaba acercando: “Tristeza te lo pido, déjame ir contigo”. – No AMOR… respondió la Tristeza. – Estoy tan triste que necesito estar sola.
Luego el Buen Humor pasó frente al AMOR, pero estaba tan contento que no sintió que lo estaban llamando.
De repente una voz dijo: “Ven AMOR te llevo conmigo”. El AMOR miró a ver quien le hablaba y vio a un viejo.
El AMOR se sintió tan contento y lleno de gozo que se olvidó de preguntar el nombre del viejo.
Cuando llegó a tierra firme, el viejo se fue. El AMOR se dio cuenta de cuanto le debía y le pregunto al Saber: “Saber, ¿puedes decirme quien era este que me ayudo?”.
-”Ha sido el Tiempo”, respondió el Saber, con voz serena.
-¿El Tiempo?… se preguntó el AMOR, ¿Por qué será que el tiempo me ha ayudado?
Porque solo el Tiempo es capaz de comprender cuan importante es el AMOR en la vida.

jueves, 15 de mayo de 2014

LOS 3 ANCIANOS

Una mujer que salía de su casa vio a tres ancianos de barbas blancas sentados en el jardín de su casa.
“No sé quienes son ustedes, pero deben tener hambre. Por favor, pasen que les daré algo de comer”
“¿Está el hombre de la casa?”, preguntó uno de ellos.
“No, no está”
“Entonces no podremos entrar” dijeron los ancianos.
Al atardecer, cuando su marido llegó a la casa, la señora le contó lo sucedido.
“Ve y dile que yo estoy en casa y que los invito a pasar a los tres”
La mujer salió y los invitó amablemente a que pasaran.
“Nosotros no podemos ser invitados a una casa juntos” dijo con determinación uno de los ancianos.
“¿Por qué?” preguntó la mujer muy intrigada.
El anciano con la barba más blanca respondió:
“Su nombre es Riqueza” dijo señalando a uno de ellos y señalando al otro agregó: “Su nombre es Éxito, y el mío es Amor… ahora, ve con tu marido y decidan a cuál de nosotros prefieren invitar”
“¡Qué fantástico! Si ese es el caso invitemos a Riqueza. Así llenaremos nuestra casa con riquezas” Dijo el marido cuando escuchó lo que le contó la mujer.
“No, no me parece buena idea… ¿Por qué no elegimos a Éxito? así seremos admirados por todos”
su hija adoptiva que escuchaba la conversación desde su habitación exclamó:
“¿ Por qué no invitamos al Amor? ¿Por qué siempre hay que pensar en las riquezas y el éxito como si el amor no fuera importante para nosotros?”
La intervención de la niña dejó a sus padres en silencio y avergonzados.
“Sí, ella tiene razón” dijo la madre.
Y el padre agregó: “Sigamos el consejo de nuestra hija”
La mujer salió al encuentro de los ancianos y preguntó :
“¿Cuál de ustedes es Amor? … Por favor, pase y sea nuestro invitado.”
Amor se levantó y comenzó a caminar hacia la casa. Los otros dos también se levantaron y los siguieron. Sorprendida, la mujer miró a Éxito y a Riqueza y preguntó:
“Sí yo solamente invité a Amor ¿Por qué ustedes también vienen?”
Los tres ancianos respondieron juntos:
“Si hubiese invitado a Éxito o a Riqueza los otros dos se quedaban afuera, pero ustedes invitaron a Amor, y donde quiera que él vaya los otros lo siguen. Porque donde hay amor siempre hay éxito y riqueza.

miércoles, 14 de mayo de 2014

LA MUJER PERFECTA

Nasrudin conversaba con un amigo.
- Entonces, ¿nunca pensaste en casarte?
- Sí, pensé –respondió Nasrudin. – En mi juventud resolví buscar a la mujer perfecta. Crucé el desierto, llegué a Damasco y conocí a una mujer muy espiritual y linda; pero ella no sabía nada de las cosas de este mundo.
Continué viajando y fui a Isfahan; allí encontré a una mujer que conocía el reino de la materia y el del espíritu, pero no era bonita.
Entonces, resolví ir hasta El Cairo, donde cené en la casa de una moza bonita, religiosa y conocedora de la realidad material.
- ¿Y por qué no te casaste con ella?
- ¡Ah, compañero mío! Lamentablemente ella también quería un hombre perfecto… 

EL AGUILA Y EL HALCON


Cuenta una vieja leyenda de los indios Sioux que una vez llegaron hasta la tienda del viejo brujo de la tribu, tomados de la mano, Toro Bravo, el más valiente y honorable de los jóvenes guerreros, y Nube Alta la hija del cacique y una de las más hermosas mujeres de la tribu.
- Nos amamos – empezó el joven.
- Y nos vamos a casar – dijo ella.
- Y nos queremos tanto que tenemos miedo. Queremos un hechizo, un conjuro, un talismán. Algo que nos garantice que podremos estar siempre juntos. Que nos asegure que estaremos uno al lado del otro hasta encontrar a Manitú el día de la muerte.
- Por favor – repitieron – ¿hay algo que podamos hacer?
El viejo los miró y se emocionó de verlos tan jóvenes, tan enamorados, tan anhelantes esperando su palabra.
- Hay algo…- dijo el viejo después de una larga pausa -. Pero no sé…es una tarea muy difícil y sacrificada.
- No importa – dijeron los dos-. Lo que sea – ratificó Toro Bravo.
- Bien -dijo el brujo-. Nube Alta, ¿ves el monte al norte de nuestra aldea? Deberás escalarlo sola y sin más armas que una red y tus manos, y deberás cazar el halcón más hermoso y vigoroso del monte. Si lo atrapas, deberás traerlo aquí con vida el tercer día después de la luna llena. ¿Comprendiste?
La joven asintió en silencio.
- Y tú, Toro Bravo – siguió el brujo – deberás escalar la Montaña del Trueno; cuando llegues a la cima, encontrarás la más brava de todas las águilas y, solamente con tus manos y una red, deberás atraparla sin heridas y traerla ante mi, viva, el mismo día en que vendrá Nube Alta…¡salgan ahora!.
Los jóvenes se miraron con ternura y después de una fugaz sonrisa salieron a cumplir la misión encomendada, ella hacia el norte, él hacia el sur…. El día establecido, frente a la tienda del brujo, los dos jóvenes esperaban con sendas bolsas de tela que contenían las aves solicitadas.
El viejo les pidió que con mucho cuidado las sacaran de las bolsas. Los jóvenes lo hicieron y expusieron ante la aprobación del viejo las aves cazadas. Eran verdaderamente hermosos ejemplares, sin duda lo mejor de su estirpe.
- ¿Volaban alto?- preguntó el brujo.
- Sí, sin duda. Como lo pediste… ¿y ahora? – preguntó el joven- ¿los mataremos y beberemos el honor de su sangre?
- No – dijo el viejo-.
- Los cocinaremos y comeremos el valor en su carne – propuso la joven-.
- No – repitió el viejo-. Harán lo que les digo: Tomen las aves y átenlas entre sí por las patas con estas tiras de cuero… Cuando las hayan anudado, suéltenlas y que vuelen libres.
El guerrero y la joven hicieron lo que se les pedía y soltaron los pájaros. El águila y el halcón intentaron levantar vuelo pero solo consiguieron revolcarse en el piso. Unos minutos después, irritadas por la incapacidad, las aves arremetieron a picotazos entre si hasta lastimarse.
Este es el conjuro…


-Jamás olviden lo que han visto. Son ustedes como un águila y un halcón; si se atan el uno al otro, aunque lo hagan
por amor, no sólo vivirán arrastrándose, sino que además, tarde o temprano, empezarán a lastimarse uno al otro.

Moraleja sobre el matrimonio: Si quieren que el amor entre ustedes perdure, vuelen juntos pero jamás atados

LA ROSA DE JUAN




Juan se sentía solo, volvía a su departamento, y el silencio era el único que lo esperaba. Juan estaba triste, Juan estaba solo, muy solo. Y Juan tuvo una brillante idea:
- Compañía, eso lo que necesito, compañía. Y alegre se puso a pensar que tipo de compañía.
De chico le habían dicho que lo ideal para compañía era una rosa. También le habían advertido que las rosas tenían espinas y que si uno no era cuidadoso, en vez de disfrutar el placer de mirarlas, tocarlas y oler el perfume que emitían, podían terminar lamentándose todo el día de que la rosa era mala, que cada vez que uno se acercaba lo pinchaba a propósito con sus espinas, y otras tantas advertencias del mismo género.
Pero para Juan el riesgo valía la pena. Quería una rosa y salió a buscarla. Y cuando uno busca mucho siempre encuentra lo que busca.
Así Juan salió decidido a la calle y, oh casualidad, a la vuelta de la oficina donde trabajaba la vio, estaba ahí delante de sus ojos, como había estado ella durante meses esperándolo y mirándolo cada vez que él pasaba, pero nunca se habían cruzado miradas. Pero esta vez Juan estaba decidido a ser feliz y se acerco directamente a ella, tan directamente que la hizo temblar.
Juan la miró, y quedó totalmente embriagado y envuelto por su perfume. Juan estaba enamorado. Luego de un rato de pleno éxtasis Juan se decidió. Dio media vuelta y encaró al padre de la dama.
- ¿Cuánto cuesta?, preguntó con voz firme.
- Veinte pesos, contestó el Vendedor de Flores, sorprendido por la pregunta tan imprevista, pues ni siquiera le había dicho buen día, y agregó ya recompuesto.
- Con diez pesos más se lleva esta maceta hermosa, señalando una roja de cerámica.
A los pocos minutos Juan salía feliz del negocio con María, pues así le había puesto de nombre a la rosa. María salió alegre a la calle, en los brazos de Juan y vestida con su hermoso vestido de maceta roja.
Juan llegó a su casa, puso a María en el mejor lugar, donde podía recibir la luz de la mañana, luego guardó el comprobante de compra de la rosa y finalmente se sentó a su lado. El resto de la tarde se deleitó mirándola y sintiéndola.
Los primeros días fueron realmente una “Luna de Miel”.
A la noche Juan se llevaba a María al dormitorio para tenerla al alcance de su mano.
La luna de miel entre ellos duró poco.
Una noche Juan entre sueños acercó su mano para acariciar a María y de pronto el dolor intenso y una gota de sangre salió de su dedo índice. María, con sus espinas lo había lastimado. Juan sintió que el dolor pasaba pero volvieron a su mente las advertencias: cuidado con las rosas, cuando tu quieres brindarles amor ellas te lastiman intencionalmente con sus espinas.
Al día siguiente Juan se olvidó de ponerle agua en la maceta a la Rosa, también se olvidó de ponerla al sol, y así hizo los siguientes tres días.
Fue el sábado que Juan al entrar al dormitorio la vio.
María estaba triste, sus pétalos que antes eran hermosos, estaban caídos sobre la mesita de luz.
Su tierra reseca.
Juan sorprendido por la actitud de María, buscó la factura de compra, pues tenía anotado en teléfono del negocio de plantas y llamó para reclamar.
- ¿Qué problema tiene con la planta que le vendí? preguntó el vendedor.
-¿Qué no la riega, ni la pone al sol desde hace tres días? preguntó el vendedor indignado.
Juan cortó, medio disculpándose por su ignorancia y se puso a regar a la rosa, pero no podía evitar recordar con bronca lo que ella le había hecho: lo había lastimado cuando el se acercó, y seguramente lo había hecho con intención.
Y comenzó a regarla hasta inundarla de agua, mientras pensaba…
- Voy a inundarla bien, así no la riego por siete días.
- Voy a dejarla al sol así no necesito moverla.
Y luego Juan se fue a hacer otras cosas, sus cosas, las que eran realmente importantes para él.
Y María siguió perdiendo pétalos. Ya no emitía ningún perfume, ya no sentía la energía y la palabra de Juan, y María se dejaba morir.
Pasaron otros tres días y Juan fue a un cine solo. Durante la película vio una escena que lo conmovió, y de pronto apareció la imagen de María ante sus ojos con sus pétalos caídos. Juan sintió en el fondo de su ser que María se moría de pena, y se dio cuenta que la amaba, que extrañaba sus formas, su tersura, su perfume, y Juan salió a las corridas del cine y volvió a su casa.
Encontró a María desfalleciente, la tomó entre sus brazos, le sacó el agua en exceso de la maceta, y le habló del amor que le tenía, durante toda la noche. A la mañana la puso al sol, le agregó un poco de fertilizante, y así la cuidó en su convalecencia que duró casi un mes.
Al mes María estaba radiante y enamorada como siempre.
Y ese día Juan tomó el comprobante de compra y rompiéndolo en mil pedacitos le dijo a María
- Alguna vez creí, equivocadamente, que porque te había comprado y puesto el comprobante de compra bajo la maceta podía decirte – ” soy tu dueño, y no te riego”.
- Hoy me doy cuenta que nuestra relación se sustenta en cambio en el amor diario que nos podamos dar, en que yo te riegue todos los días con mi amor, mientras tu me llenas con tu hermoso perfume, tu tersura, tu compañía y y tu hermoso perfume.
Que todos los cuidados que yo te haya dispensado en el pasado, vivirán siempre como un maravilloso recuerdo, pero que no son suficientes para el día de hoy.
Y que a partir del día de hoy, para poder disfrutar te te seguiré regando día tras día.
Y además tendré presente que si me encuentro con tus espinas puede ser, que parte de la culpa sea mía por no saber acercarme a ti.

LA NATURALEZA DE LA MENTE



Se trataba de un hombre que llevaba muchas horas viajando a pie y estaba realmente cansado y sudoroso bajo el implacable sol de la India. Extenuado y sin poder dar un paso más, se echó a descansar bajo un frondoso árbol. El suelo estaba duro y el hombre pensó en lo agradable que sería disponer de una cama. Resulta que aquél era un árbol celestial de los que conceden los deseos de los pensamientos y los hacen realidad. Así es que al punto apareció una confortable cama.El hombre se echó sobre ella y estaba disfrutando en el mullido lecho cuando pensó en lo placentero que resultaría que una joven le diera masaje en sus fatigadas piernas. Al momento apareció una bellísima joven que comenzó a procurarle un delicioso masaje. Bien descansado, sintió hambre y pensó en qué grato sería poder degustar una sabrosa y opípara comida. En el acto aparecieron ante él los más suculentos manjares. El hombre comió hasta saciarse y se sentía muy dichoso. De repente le asaltó un pensamiento: “!Mira que si ahora un tigre me atacase!” Apareció un tigre y lo devoró.
Moraleja
Cambiante y descontrolada es la naturaleza de la mente. Aplícate a conocerla y dominarla y disiparás para siempre el peor de los tigres: el que mora dentro de ella misma.